ingredientes:
- 120 gr azúcar
- 125 gr mantequilla a punto pomada
- 3 yemas de huevo
- 170 gr harina
- 10 gr levadura Royal
- una pizca de sal
Punto pomada: se obtiene sacando la mantequilla a temperatura ambiente 0,5-1 h antes ( según la temperatura ambiente) de manera que quede blandita SIN estar derretida.
Encender el horno a 180ºC.
Batir un rato la matequilla con las varillas, para ablandarla más, y añadir el azúcar, batiendo más.
Luego añadir las yemas de 1 en 1, batiendo sin parar entre dichas adiciones.
Poco a poco, verter la harina con la sal y la levadura, todo ello tamizado ( colado). A partir de ahí, se bate poco, lo justo para homogeneizar.
Si queda blando, se mete en manga pastelera y se reparte con ella sobre los moldes. A veces, si la mantequilla estaba demasiado dura (fría) puede quedar la masa más espesa, y en este caso, es mejor hacer unas bolas con las manos y aplastarlas algo dentro del molde, hasta rellenarlo.
Hornear unos 13-15 min y sacar.
CUIDADO: recien horneadas, estas galletas son muy frágiles, y se rompen con facilidad, por lo que hay que tener cuidado al sacarlas de los moldes. Colocar en una rejilla para que se enfrien, y luego ya son más manejables. Quedan con textura crujiente.
PRESENTACIÖN:
Yo las ví cubiertas de una mezcla de crema pastelera con nata montada, y sobre ésto, fresas.
En mi caso le puse una crema pastelera y arándanos.
También se pueden tomar solas, como galletas.
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